¡La mantequilla de almendras casera es saludable, asequible e incluso más deliciosa que la comprada en la tienda! También es fácil de hacer. Solo necesitarás un buen procesador de alimentos o licuadora. La receta rinde alrededor de 1 ⅔ taza de mantequilla de almendras (eso es 16 onzas, el equivalente a un frasco de mantequilla de almendras de la tienda).


INGREDIENTES

  • 16 onzas ( 3 tazas ) de almendras crudas
  • ¼ cucharadita de sal
  • Opcional: ¼ de cucharadita de canela molida
  • Opcional: ½ cucharadita de extracto de vainilla
  • Opcional: 2 cucharadas de jarabe de arce o miel

INSTRUCCIONES

  1. Precaliente el horno a 350 grados Fahrenheit. Extienda las almendras en una bandeja para hornear grande con borde y tueste las almendras durante 10 minutos, revolviendo hasta la mitad.
  2. Deje que las almendras se enfríen hasta que estén tibias (no calientes), unos 10 minutos.
  3. Transfiera las almendras a una licuadora o procesador de alimentos de alta velocidad. Mezcle hasta que quede cremoso, deteniéndose para raspar los lados según sea necesario. Vas a pensar que nunca se mezclará, ¡pero ten paciencia! Las almendras pasarán de ser grumos parecidos a harina a una bola contra el costado del procesador de alimentos (sigue raspando los lados y rompiendo la bola) y, finalmente, se volverá deliciosamente cremosa. Si la mezcla se calienta mucho en el camino, detente y deja que se enfríe durante unos minutos.
  4. Una vez que la mantequilla de almendras esté muy suave y cremosa (¡no antes!), puede mezclar los complementos que desee. Siempre agrego sal, para obtener más sabor en general. También puede agregar canela para un toque de especias y vainilla y/o jarabe de arce para la mantequilla de almendras que sabe más especial que la comprada en la tienda.
  5. Mezcle hasta que los complementos se dispersen uniformemente. Cuando agregué el jarabe de arce, tuve que dejar que la mezcla se enfriara y luego mezclar unos minutos más para que volviera a ser cremosa.
  6. Deje que la mantequilla de almendras se enfríe a temperatura ambiente, luego transfiera la mezcla a un tarro de albañil y atornille la tapa. Guárdelo en el refrigerador hasta por 2 semanas, o hasta que vea u huela algún signo de deterioro.